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Lastras de Cuéllar (Segovia)

Nadie es consciente de qué es vivir sin agua potable. No es sólo no poder beber. No puedes cocinar, no te puedes lavar los dientes con agua del grifo. (…) Tengo un compañero que bañaba a sus bebés con agua embotellada

En la reunión, les ofrecimos a los políticos un vaso con el mismo agua que nos obligaban a beber a nosotros. Nadie la quiso probar

— Mercedes Rodríguez, portavoz de la plataforma ¡Lastras potable, Ya!
Balisa, Santa María la
Real de Nieva (Segovia)

Estas máquinas potabilizadoras funcionan así. El mantenimiento es caro, desperdician mucha agua y el rechazo va ahí a un arroyo. Ahí se quedarán los nitratos. No sabemos dónde irán

— José María Cubo, concejal de Balisa
Consorcio de aguas,
Castellón de la Plana

Puede llegar un momento en que la contaminación por nitratos colapse los pozos de los que bebe la provincia de Castellón

— Jorge Monferrer Daudí, presidente del Consorcio de Aguas de la Plana
Facultad de Ciencias,
Universidad de Burgos

Los nitratos son algo que no debería estar en el agua de consumo humano. Están provocando graves problemas de salud.

Me da muchísima pena que gente que simplemente viene para saber el estado del agua que está bebiendo tenga que tener miedo a las represalias

— Raquel Hernández, investigadora del grupo de polímeros
DATADISTA
MEDIOAMBIENTE SALUD PÚBLICA

Veneno en el grifo:
ruta por la España sin derecho al agua potable

Por Ana Tudela y Antonio Delgado

26 de mayo de 2024

Europa se la juega. Durante décadas ha ido dañando gravemente sus aguas subterráneas con nitratos, pesticidas, ha sobreexplotado sus acuíferos. 14 periodistas y 7 medios europeos, apoyados por Journalismfund Europe y coordinados por Arena for Journalism in Europe han investigado durante meses la magnitud del problema en una investigación impulsada por DATADISTA.

El proyecto Under the Surface ha logrado el mapa interactivo más actualizado de los daños a los acuíferos de Europa reconocidos por sus países ante Bruselas. La magnitud del problema, demuestra la investigación, es aún mucho mayor de lo que dicen los datos oficiales. En España, ese problema ya sale por los grifos de las casas de cientos de miles de personas. Este es un viaje para contar su historia.

Datos

Más de un millón de personas en España residen en puntos críticos por contaminación por nitratos en el agua del grifo.

Igual o superior a 30mg/l
Igual o superior 50mg/l

España endureció en 2023 su normativa sobre la presencia de contaminantes en el agua de consumo humano. Al conocido límite de 50 mg por litro para nitratos, a partir del cual es obligatorio alertar a la población de que el agua no es apta para beber ni cocinar, se ha añadido una metodología que convierte en puntos críticos las zonas de abastecimiento en los que los niveles se sitúen por encima de 30 mg/l de manera continuada.

En esos niveles, dados los riesgos que implican ya para la salud, es necesario también tomar medidas inmediatas para mitigar la contaminación, lo que muestra un problema aún mayor de lo que se calculaba hasta ahora.

Datos
Igual o superior a 30mg/l
Igual o superior 50mg/l

Núcleos de población pertenecientes a 422 municipios de toda España detectaron entre 2021 y 2022 niveles de contaminación por nitratos por encima de 30mg/l, de los cuales 171 municipios con una población de más de 200.000 personas se situaron por encima de 50mg/l en 2022 en todas o en algunas de sus redes de abastecimiento, según un análisis realizado por DATADISTA de 5,1 millones de análisis de aguas de redes de abastecimiento realizados por los operadores y autoridades sanitarias.

La situación actual no es posible conocerla de manera pormenorizada, ya que 2022 es el último dato disponible publicado por el Ministerio de Sanidad con la información remitida por los operadores a través del Sistema de Información Nacional de Aguas de Consumo (SINAC).

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Hay una España que se está cosiendo viva a base de parches en su red de abastecimiento allí donde dependía históricamente de uno de sus grandes tesoros: sus aguas subterráneas.

Con escaso reflejo en el debate público, se tienden pequeñas canalizaciones, se colocan gomas echadas sobre la tierra y hasta colgando de los árboles o se entierran tuberías gigantescas de cientos de millones de euros para traer agua superficial donde se bebía de acuífero.

Ese es el mejor de los casos. Donde no es posible traer agua superficial, se invierten cantidades desproporcionadas, para los presupuestos de pequeños municipios, en plantas que desnitrifican el agua pero solo arrojan una parte potable. El resto, un concentrado de nitratos, se deja libre en arroyos, ríos, convirtiéndose en un nuevo problema medioambiental.

Y allí donde nadie se plantea inversiones en infraestructuras: agua embotellada. Un negocio generador de plástico que en ocasiones se subvenciona con dinero público total o parcialmente y en otras no. En todos los casos, el recibo del agua se sigue abonando como si fuera potable.

A veces ese agua embotellada sale de un manantial de propiedad privada a tan solo 25 kilómetros de los pueblos que ya no la pueden beber de sus grifos.

Esta investigación se ha adentrado en las historias de gente que ha vivido lo suficiente como para recordar cuando tenía que ir con cántaros a la fuente a por el agua porque no había canalización hasta las casas y ahora le cuesta creer que vuelva a tener que cargar, a su edad, con garrafas y botellas.

Por sus protestas, en ocasiones durante años, y también con un inmenso miedo a hablar, porque todo el mundo sabe que la causa está en el campo y del campo no se habla.

Con las tractoradas en mente y las elecciones europeas a la vuelta de la esquina, este recorrido también ha consultado a expertos para saber cómo reducir los nitratos y qué impacto tendrá en la industria agrícola. La respuesta es que es posible mantener una producción agrícola cercana a la actual si se invierte en tecnología, abonos y prácticas adecuadas. La pregunta es quién va a pagarlo. La ganadería intensiva sí creen que debe reducirse.

Nitratos: para qué se utilizan y qué efectos producen en el cuerpo humano

Los nitratos son nutrientes presentes en los fertilizantes utilizados en la agricultura. Estos fertilizantes pueden provenir de fuentes artificiales o de los excrementos de animales, como los purines provenientes de la ganadería industrial. La Comisión Europea calculó en 2021 que la mitad de los abonos que se extienden en los campos no abonan nada, se escapan de las raíces de las plantas y acaban muchas veces en los acuíferos. Esa sobrefertilización supone un gasto innecesario para el campo de miles de millones al año.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Unión Europea establecen como nivel máximo permitido en el agua potable el valor de 50 miligramos por litro de nitrato. Es el límite que tenemos en España.

Consumir agua con altos niveles de nitratos puede afectar a la forma en que la sangre transporta el oxígeno y producir metahemoglobinemia, una enfermedad que pueden desarrollar los bebés lactantes menores de seis meses. Es a raíz del estudio de esta enfermedad que la OMS estableció el límite de 50 mg/l en 1962.

Molécula de nitrato

Estudios más recientes observan que a largo plazo los nitratos en el agua del grifo también afectan a la población general en niveles mucho más bajos que los marcados por las normativas. El Instituto Nacional del Cáncer de EEUU recopila información de estudios que indican que una larga exposición a nitratos puede aumentar el riesgo de cáncer de cólon, riñón y estomágo. También se observa alguna evidencia en el cáncer de tiroides y ovario en mujeres.

Un estudio publicado en 2023, liderado por el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), relaciona la exposición a nitratos en el agua con la aparición de tumores de próstata agresivos en hombres menores de 60 años. Los participantes que bebieron agua con concentraciones de nitratos por encima de 14 mg/día triplicaban la probabilidad de desarrollar un tumor de próstata agresivo.

Carolina Donat, investigadora Ramón y Cajal en la Facultad de Farmacia de la Universidad de Barcelona y una de las autoras de este estudio, señala que "en base a la evidencia que estamos encontrando los científicos a nivel internacional, ya se ven incrementos de riesgo de cáncer muy por debajo de los 50 mg/l. Estamos reivindicando que se vuelvan a revisar las normativas".

La nueva normativa española sobre la calidad del agua de consumo obliga a las autoridades locales a desarrollar un Plan Sanitario del Agua (PSA) para cada red de abastecimiento, con el fin de prevenir su contaminación y determinar los niveles de riesgo para la salud. El nivel de riesgo lo determina la combinación de la gravedad del nivel de contaminación y la probabilidad de que esta ocurra si no se toman medidas. Ver nota metodológica.

Igual o superior a 30mg/l
Igual o superior 50mg/l

La contaminación por nitratos del agua del grifo está relacionada directamente con la calidad de las aguas sobre las que se encuentran sus puntos de abastecimiento. Normalmente cuando hay problemas por nitratos en el agua de consumo es debido al mal estado del acuífero sobre el que se asienta.

Datos

El 44% de los acuíferos está en mal estado en España

Buen estado
Mal estado

Los dos problemas principales que sufren los acuíferos en España son debido a la sobrexplotación y a la contaminación, principalmente por nitrato pero también por pesticidas o arsénico. La sobreexplotación y la contaminación se relacionan entre sí, porque cuanto más escasa es el agua, mayor es la concentración de los contaminantes. La agricultura y ganadería son los principales causantes de este mal estado.

Datos

Los acuíferos en Europa

Buen estado
Mal estado
Desconocido
Sin datos

En Europa, la situación cambia de un país a otro. Esta investigación ha analizado los 16 países que han enviado sus datos más recientes sobre el estado de sus acuíferos a la Comisión Europea. Alrededor del 15% de sus acuíferos están en mal estado por sobreexplotación, contaminación o ambas. Por superficie, representa el 26% de la extensión total de los acuíferos.

Es la foto más conservadora, los acuíferos que los países miembros ya han reconocido oficialmente a Bruselas que están en mal estado y donde están obligados a tomar medidas para revertirlo. La realidad, dado el escaso control en algunos de los países y los datos que ha mostrado esta investigación, es sensiblemente peor.

Igual o superior a 30mg/l
Igual o superior 50mg/l
Buen estado de los acuíferos
Mal estado de los acuíferos

Lastras de Cuéllar (Segovia) es uno de los municipios españoles que ha sufrido contaminación por nitratos y arsénico en su agua de consumo. El municipio está situado entre dos acuíferos que están en mal estado: la masa de agua subterránea Tierra de Pinares, que está en mal estado por sobreexplotación y contaminación por nitratos y materia orgánica; y la masa curso medio del Eresma, Pirón y Cega, que se encuentra en mal estado por contaminación por nitratos y materia orgánica.

Imagen de Lastras de Cuéllar (Segovia)
Ayuntamiento de Lastras de Cuéllar | DATADISTA
Manual para ganar una protesta

Lastras de Cuéllar (Segovia)

  • 7 años sin agua potable (2015-2022)
  • Contaminación por arsénico y nitratos
  • Solución: Canalización desde río

Una pareja ya jubilada pasea por la plaza de Lastras de Cuéllar, en la provincia de Segovia. Aún recuerdan los tiempos en que, por no haber, no había grifos en las casas. Cuando ella y sus 10 hermanos se hartaban de ir a buscar el agua a alguna de las fuentes del pueblo. Los días de helada cuando los cántaros se les resbalaban de las manos y lo ‘contento’ que se ponía el padre cuando veía el estropicio.

También recuerdan el malestar, el enfado cuando el ayuntamiento anunció que el agua del grifo quedaba reservada para uso sanitario. Había dejado de ser potable. No beber. No cocinar.

Historia de la protesta de Lastras contada por Mercedes Rodríguez, portavoz de la plataforma ¡Lastras potable, Ya! y los vecinos Luisa Herrero y Francisco Calvente.

Los análisis mostraban niveles de arsénico incompatibles con la salud. La sobreexplotación del acuífero que abastecía al pueblo había removido el elemento de la roca y les salía por los grifos. El ayuntamiento optó por repartir botellas de agua semanalmente, parcialmente subvencionadas, mientras se instalaba un filtro. 50.000 euros más los 30.000 de los recambios que tenía que afrontar una población de 350 habitantes en invierno que llega a más de 1.500 en verano.

Al año, los análisis del agua hicieron sonar otra alerta sanitaria: nitratos. Volvieron las botellas de agua. Lastras pidió que dejaran de ponerles parches, cada vez más caros, a un agua contaminada que no parecía tener posibilidad de ir a mejor. Pidieron una derivación de agua superficial desde uno de los manantiales del río Cega situado a tan solo 5 kilómetros del pueblo. Nadie les hizo caso.

Cuando llegó la pandemia, al pequeño y envejecido pueblo de Lastras, en lugar de reforzarle la sanidad le quitaron el médico. En cuanto pasó el confinamiento, el pueblo se echó a la calle. Con la vuelta del médico al menos algunos días a la semana, descubrieron que las administraciones reaccionaban si se hacían visibles. Y nació ¡Lastras potable, Ya!

En la hora que había sido de los aplausos para los sanitarios pasaron a manifestarse cada lunes en la plaza pidiendo agua que pudieran beber. Las fachadas se adornaron con las botellas de plástico que se les acumulaban por cada rincón de las casas, el árbol de Navidad del pueblo pasó a ser un pino de botellas, levantaron en el centro de su plaza una montaña gigante de plástico generado en una sola semana. Abrieron canales en Facebook, Twitter, Youtube...

Cuando Lastras empezó a aparecer en los medios y con ello en el mapa, los políticos empezaron a pasar por allí. Lastras los convocó en el pueblo. Todos acudieron. En la mesa de la reunión, jarras y vasos de agua aparecían como gesto de hospitalidad para el encuentro. Agua de la fuente, avisaron. Nadie bebió.

La Junta y la Diputación de Segovia dijeron estar dispuestos a darle a Lastras lo que pedía, la canalización desde el río, pero no podían ‘tirar’ el dinero público porque las tuberías de agua del pueblo eran de cobre, antiguas, agujereadas y, sobre todo, de competencia municipal. No hay tuberías, no hay agua. El pueblo echó cuentas y empezaron a levantar calle tras calle, a sustituir tubería tras tubería hasta tener una red nueva que dejase sin argumentos a las administraciones regionales. Y les hicieron la canalización, de la que aún tuvieron que pagar un 20%.

En la memoria de Lastras está que durante los siete años que duró su lucha siguieron recibiendo y abonando los recibos en los que aparecía una expresión que les cambia el rostro con solo decirla: agua potable.

17 millones de euros de dinero público. Diferencia: no es agua para beber

Con todo lo que le costó a Lastras de Cuéllar lograr esos 5 kilómetros de tubería desde el manantial de Las Fuentes del Cega, unos años antes, se tendió en dos fases una tubería de 20 kilómetros (luego prolongada otros 14 más en diferentes ramales), capaz de derivar del Cega hasta 22 hectómetros de agua al año.

La idea nació en la sequía de los años noventa, cuando un grupo de regantes de nueve municipios de Segovia (Arroyos de Cuéllar, Campo de Cuéllar, Chañe, Chatún, Fresneda de Cuéllar, Gomezserracín, Narros de Cuéllar, Remondo y Sanchonuño) propusieron ante la Junta de Castilla y León que, dado el grado de sobreexplotación de las aguas subterráneas con las que regaban, se realizase una derivación de agua del río Cega y se inyectase en el acuífero.

Imagen de río Cega a su paso por Lastras de Cuéllar (Segovia)
Río Cega a su paso por Lastras de Cuéllar | DATADISTA
El acuífero con agua inyectada del río

Comarca de El Carracillo (Segovia)

Al río Cega le han ido multiplicando las demandas. En el año 2000, los pueblos de la comarca de El Carracillo, que bebían históricamente de pozo, dejaron de hacerlo debido a la sobreexplotación de los acuíferos, que había removido el arsénico, unida a la contaminación por nitratos. Unos pasaron a abastecerse del Cega y otros del Eresma.

El campo también sufría ya la falta de agua en los pozos exhaustos, incapaces de recuperarse por la sequía y la sobreexplotación, y fue entonces cuando los regantes de El Carracillo propusieron la obra para inyectar agua al acuífero. El proyecto salió adelante y empezaron a usar el acuífero sobreexplotado casi como depósito, inyectándole agua del Cega los meses de invierno para después sacarla mediante pozos en los de verano y regar. Pero ante la pujanza de cultivos como el de la fresa en la zona, el agua se les quedó corta pronto.

En febrero de 2006, la Comunidad de Regantes solicita más agua y, para ello, pasar de respetar un caudal mínimo aguas abajo, que se había establecido inicialmente en 6.898 l/s, hasta dejarlo en 1.960 l/s.

Ni las acciones de asociaciones y vecinos ni los informes desde el área de Medio Ambiente de la propia Junta de Castilla y León, ni las alertas que figuran en la declaración de las riberas del Cega como Red Natura2000 lograron evitar que el Gobierno autonómico primero y el Ministerio de Medio Ambiente después dieran el visto bueno en 2009 a la ampliación de la concesión.

Lo conseguirá revertir, en 2013 y ante los tribunales, una empresa, Cega Energía, que tiene en la parte baja del río dos aprovechamientos hidroeléctricos que podían verse comprometidos si no llegaba caudal suficiente para turbinar.

En la web de la Comunidad de Regantes de El Carracillo figura la que quiere ser la tercera fase de la obra: dar agua del Cega a las tierras de la zona norte de la comarca, recargando y explotando otro acuífero y extrayendo el agua mediante más de 80 pozos.

En 2015 se constituyó la Plataforma en Defensa del río Cega. Su preocupación es que, dado el crecimiento de la demanda de agua que soporta ya el río, acaben teniendo un problema de caudales en el Cega, que junto a su hermano el Eresma son las dos fuentes de agua superficial a las que se recurre una y otra vez para satisfacer las demandas que ya no se pueden atender de otro modo.

Imagen de Balisa, Santa María la Real de Nieva (Segovia)
Pueblo de Balisa | DATADISTA
NITRATOS EN EL AGUA POTABLE

Balisa, Santa María la Real de Nieva (Segovia)

  • 25 años con problemas en el agua potable
  • Contaminación por nitratos
  • Solución: Planta de ósmosis inversa

Dos señores con los setenta cumplidos, sombrero de paja uno, boina el otro, garrota ambos, toman el sol sentados en un banco. Sonríen y mueven la cabeza de un lado a otro cuando se les pregunta si beben el agua del grifo de su casa. No se fían. Nadie lo hace. Hace años que no se fían de las autoridades que les dicen que el agua ya es potable, que le quita los nitratos la pequeña planta de ósmosis que han instalado a las afueras de este núcleo de 50 habitantes que alcanza los 350 en las fiestas de agosto.

Miran la torre de ladrillo cilíndrica frente a ellos, donde se supone que se acumula el agua ya desnitrificada, y mueven la cabeza otra vez. Explican que es el mismo punto donde hace años les instalaron un depósito de color verde con agua traída de fuera de la que nadie quería tampoco beber. El agua subterránea de toda la región está contaminada por los nitratos de la agricultura y la ganadería intensiva.

Entrevista con José María Cubo, concejal de Santa María la Real de Nieva (Segovia).

La planta de ósmosis es una caseta de la que sale un tubo ya dañado en algunos puntos por el que en este mes de abril de 2024, con las calles del pueblo vacías, se oye circular sin descanso el rechazo del agua. De cada tres litros que entran, sale uno de agua potable y dos de rechazo, asegura José María Cubo, concejal socialista del ayuntamiento de Santa María la Real de Nieva al que pertence Balisa. ¿Dónde va ese rechazo? No hay que irse muy lejos para verlo. Al arroyo que hay a poco más de 20 metros. Allí se descarga el concentrado de nitratos que no se haya perdido antes en los rotos de la tubería. La vegetación crece con fuerza en torno a la canalización, muestra de que la tierra está recibiendo constantemente abono puro. Un milagro para que crezcan las fresas, que se han desarrollado con fuerza en la zona en la última década, pero un riesgo para las aguas, que pueden eutrofizarse, y para el organismo, cuando se concentra en exceso.

José María no entiende esa actividad de la planta en esta época que contrasta con el suelo seco durante el verano, cuando más gente hay en la población y mucha más demanda de agua. Cree que cuando la planta no es capaz de suministrar la que se demanda, les están dando directamente agua sin desnitrificar. Esa es la respuesta habitual en esta zona cuando se pregunta. La falta de confianza en las autoridades que deben velar por la salubridad del agua. La resignación en muchos casos a comprar agua embotellada.

DECIR NO A UNA PLANTA QUE QUITA LOS NITRATOS

Valdesimonte, Cantalejo (Segovia)

  • Desde 2006 con problemas en el agua
  • Contaminación por nitratos
  • Solución: Prevista una canalización de agua superficial

A Valdesimonte, entidad local menor perteneciente al municipio de Cantalejo que llega a los 250 habitantes en verano, también le ofrecieron una planta de ósmosis inversa para solucionar el problema de nitratos que arrastran desde 2006. El pueblo votó en asamblea y la rechazó. Los 200.000 euros de entonces que suponía, en un municipio con un presupuesto anual de 130.000 euros, y las informaciones que les llegaban sobre los problemas que daban allí donde se instalaban los convencieron de que esa no era su solución. Desde entonces, el pueblo bebe de agua embotellada.

El alcalde de Valdesimonte, Javier Granja, que entró nuevo tras las pasadas elecciones de 2023, quiere arreglar de una vez este problema. Le han dicho que lo de Valdesimonte se debe a que el acuífero del que beben es muy somero y que es precisamente cuando llueve cuando se infiltran rápidamente los abonos recién extendidos en los campos. En la época de lluvias, entra en vigor una norma que permite que les subvencionen el agua embotellada. A Granja le cuesta entender que esa norma se llame “decreto de sequía”.

“Mi mayor empeño es que durante este gobierno se consiga el agua. Ya he dicho en la diputación que me gustaría una solución rápida porque ya llevamos mucho tiempo con esto, abandonados”. La opción que defienden es utilizar la captación de Cantalejo hacia Aldeonsancho del agua derivada desde el río San Juan. La obra está presupuestada en 380.000 euros.

Arsénico y nitratos

Municipios de Ávila

En el año 2000, las mediciones en el agua del grifo de decenas de pueblos de Castilla y León (8 en Ávila, 11 en Valladolid y 8 en Segovia) empezaron a hacer sonar las alarmas por la presencia de altos niveles de arsénico. En junio de 2001 se constataba la contaminación del agua subterránea que abastecía a pueblos que sumaban más de 16.000 habitantes.

En Ávila, se optó por suministrar agua de aljibes temporalmente hasta tener construida la solución definitiva y a mediados de 2022 se ponía en marcha la planta depuradora de agua del río Adaja para abastecer a Arévalo, Langa, Fuente del Año, Fuente el Sáuz, Magazos, Palacios de Goda y Villanueva del Aceral. Además se construyeron dos plantas potabilizadoras de pequeño tamaño para abastecer a los habitantes de Muñomer del Peco y Papatrigo, a los que se consideró imposible suministrar agua desde Arévalo dada la distancia.

En 2008, una nueva información señalaba a 26 municipios de Ávila por contaminación con arsénico y nitratos en el agua del grifo a los que se empezó a dar agua embotellada. “Albornos, Bercial de Zapardiel, Cabezas de Alambre, Cabizuela, el anejo de Jaraices en Constanzana, El Bohodón, Muñomer del Peco, Narros del Castillo, Narros de Saldueña, los anejos de Noharre y Magazos en Nava de Arévalo, Papatrigo, Pedro Rodríguez, Peñalba de Ávila, San Juan de la Encinilla, San Vicente de Arévalo, Velayos, Villanueva de Gómez, El Mirón, Navatejares, Rasueros, San Bartolomé de Corneja, Villamayor, Villar de Corneja, Viñegra y San Pedro del Arroyo. Se unió Horcajo de las Torres.

Iglesia de Cabezas de Alambre (Ávila)
Iglesia de San Cristóbal en Cabezas de Alambre | DATADISTA
ABONADOS AL AGUA DE UN MANANTIAL PRIVADO

Cabezas de Alambre (Ávila)

  • Desde 2007 con problemas en el agua
  • Contaminación por nitratos
  • Solución: Garrafas de agua parcialmente subvencionada

Cabezas de Alambre está entre los municipios que no han recibido el agua superficial que sustituya la de origen subterráneo contaminada por nitratos. Es un pequeño municipio de Ávila, con 156 habitantes empadronados de los que unos ochenta viven diariamente en el pueblo. Una parte de la población está más envejecida, en consonancia con la España rural, pero sí se mantiene aquí una población joven que trabaja en la agricultura, básicamente el cultivo de la patata, remolacha y en los últimos tiempos cada vez con más fuerza la fresa, y en la industria alimentaria. El municipio es también el más grande de una agrupación de municipios.

Cabezas de Alambre mantiene la escuela, a la que acuden a diario cuatro niñas y niños, farmacia, consultorio médico, y presume de tener bar, una tienda de ultramarinos y peluquerías. En el resto de pueblos de la agrupación, los niños tienen que desplazarse para dar clase a poblaciones de mayor tamaño como Arévalo y sus habitantes dejan las recetas médicas en un buzón del que también se recogen las medicinas días más tarde. Lo que iguala a Cabezas de Alambre con sus pueblos circundantes es que no tienen agua potable en los grifos de sus casas. Hace años que el agua de abastecimiento no se puede beber por los niveles de nitratos y los vecinos acuden a recoger agua embotellada que les financia parcialmente la Diputación y el Consistorio.

El agua embotellada con la que mantenía contrato la Diputación de Ávila al menos hasta marzo de 2023 procede de un manantial a poco más de 25 kilómetros del pueblo, el manantial de El Oso, que explota de forma privada la empresa Aguas Minerales de Ávila. Desde mediados del año pasado la empresa, más conocida como URSU, se hizo mundialmente famosa tras la entrada como inversor del futbolista Cristiano Ronaldo.

En las puertas de Cabezas de Alambre se pueden ver vacías las garrafas que URSU vende ya en Suiza o Reino Unido con su conocido eslogan: “alcalina de pH 9, con excelente sabor y baja mineralización”. Según el contrato de la Diputación de Ávila vigente al menos desde 2015 y hasta marzo de 2023, URSU recibía 100.000 euros al año para abastecer a pueblos de Ávila con garrafas entre 5 y 8 litros.

Los problemas con el agua hace tiempo que no son exclusivos de las zonas donde escasea la lluvia. Ya no llueve como solía, ni en tiempo ni en forma tampoco en el norte, pero este año les costó creer lo que estaban viendo en la empresa municipal de aguas de Vitoria, en Álava. En cuatro localidades menores del municipio, los picos de nitratos por encima de los límites legales que habían visto en otras ocasiones por el conocido problema de nitratos en esta zona agrícola y ganadera, no remitían a los pocos días como había ocurrido hasta entonces.

Mandojana (Vitoria-Gasteiz)
Mandojana (Vitoria-Gasteiz) | DATADISTA
El problema ya está allí donde llueve más

Legarda, Mandojana, Guereña, Artaza (Vitoria-Gasteiz)

  • Desde febrero de 2024
  • Contaminación por nitratos
  • Solución: Conexión a la red de Vitoria-Gasteiz

Una goma de dos kilómetros recorre el suelo, se cuelga de los árboles, se mete bajo unos metros de tierra y vuelve a aparecer por los caminos y entre los campos de las localidades de Legarda, Mandojana, Guereña y Artaza. Va a conectar el depósito de un municipio vecino, Ulubarri Viña con el de Mandojana, que abastece al resto. Es una solución cuya provisionalidad salta a la vista y que aún así ha tardado meses en llegar.

Santiago, vecino de Legarda.

A principios de febrero de 2024, en la empresa municipal de aguas de Vitoria-Gasteiz (AMVISA), detectaron que las citadas cuatro localidades superaban los parámetros legales de nitratos en el agua de consumo humano. Como en la siguiente medición los niveles no remitían, como había ocurrido en otras ocasiones, decidieron empezar a medir a diario. A finales de mes saltaban las alertas. En lugar de bajar, los nitratos llegaban a 68 mg/litro.

Manifestación de los vecinos

Fuentes del Ayuntamiento reconocen que hubo reticencias a firmar la orden de declarar que el agua no era potable. Se hizo, pero en cuanto bajaron los niveles, se levantó la prohibición. A los dos días, vuelven a superarse los 50 miligramos por litro. La prohibición se hace permanente. Hasta hoy.

La solución propuesta por el Ayuntamiento de Vitoria es una opción muy conocida en localidades mucho más al sur y ha llegado mucho más rápido que los años que este recorrido ha observado pueblo tras pueblo en otras zonas del país: llevar agua superficial allí donde el agua subterránea ha dejado de ser una opción. Pero los meses que tardaron en ser escuchados se les hicieron eternos a quienes veían perdido su derecho al agua potable.

La solución, de momento, es claramente provisional: una goma tendida mayoritariamente en superficie. Fuentes municipales aseguran que, en el municipio donde está el depósito al que se ha enganchado la canalización, pusieron problemas durante semanas, lo que retrasó el inicio de los trabajos. La desconfianza cuando se habla de algo tan esencial como el agua se salvó, al parecer, cuando se les aseguró que eso no mermaría su suministro.

Fueran cuales fuesen las razones de los retrasos, eso no les quita a los vecinos y vecinas de las localidades afectadas la sensación de abandono, de sentirse ciudadanos de segunda por sumar poco más de 100 vecinos entre los cuatro núcleos de población. Han visto pasar los días sin que empezasen las obras, se han sentido ninguneados, ignorados cuando llamaban a las administraciones, en las reuniones a las que eran convocados se desesperan viendo a algunos políticos mirar el móvil mientras ellos reclaman una solución inmediata para tener agua potable en sus casas. También están convencidos de que, si hoy están a punto de recuperar el agua potable, es porque decidieron manifestarse, llevar pancartas y botellas de plástico ante el Ayuntamiento de Vitoria, el modo que se está demostrando más efectivo por todo este recorrido: la protesta.

Entrevista con Iker Egaña, Jefe de Área de Tratamiento y Calidad de AMVISA.

Se espera que la canalización provisional esté operativa en los próximos días tras las pruebas de calidad del agua. La definitiva, que quiere replicar la conexión con el anillo de Vitoria pero bajo el suelo, tardará algo más. Los cálculos dicen que el coste puede oscilar entre uno y dos millones de euros.

Según Iker Egaña, Jefe de Área de Tratamiento y Calidad de AMVISA, “está claro que el cambio climático ya está afectando. Este mismo episodio de los nitratos también demuestra que ya los sistemas no tienen la misma capacidad de recuperación".

Mandojana (Vitoria-Gasteiz)
Edificio de la Facultad de Ciencias | DATADISTA
El día en que la ciencia descubrió un roto en la información sobre salud

Facultad de Ciencias, Universidad de Burgos

2024. Un grupo de científicos decide medir los nitratos en agua del grifo de pueblos de su provincia y, ante los resultados obtenidos, acaba recibiendo presiones y avisos por parte de ayuntamientos y políticos que no quieren que esa información salga a la luz. Esta es la versión corta de una historia que empieza cuando el Grupo de Investigación de Polímeros de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Burgos iniciaba su proyecto de investigación para encontrar materiales capaces de atrapar los nitratos en el agua. Tenían el dinero, procedente de una financiación de la Junta de Castilla y León, y el objetivo: encontrar una solución a un problema local que conocían desde hacía décadas en sus propios municipios y los de su entorno.

Así se alió la ciencia con los habitantes de pueblos de Burgos, con Raquel Hernández y Saúl Vallejos, el Grupo de Investigación de Polímeros de la Universidad.

Para probar los materiales, optaron por hacerlo con agua real, de grifos reales de casas reales, no simular las muestras en el laboratorio. Así, de paso, podían informar a las vecinas y vecinos de los municipios que así lo deseasen del nivel de nitratos en el agua que bebían a diario, con la que cocinaban. Pusieron un anuncio en redes con un teléfono para contactar y recibir las instrucciones precisas. Esperaban recibir una veintena de llamadas. Lanzaron el mensaje. El teléfono empezó a sonar. Ya van por 400 muestras.

Manifestación de los vecinos
Mapa con las mediciones que han arrojado
niveles por encima de 50 mg/l de nitratos en muestras de agua tomadas por los vecinos de localidades de la provincia de Burgos en grifos, fuentes públicas y manantiales, entre enero y abril de 2024, y analizadas por el Grupo de Polímeros de la Universidad de Burgos.
Núcleos de población con valores por encima de 50 mg/l en 2022 según los datos del SINAC.

La gente acudió de muy diversos puntos con sus muestras etiquetadas, preparadas siguiendo las indicaciones que les habían dado, demostrando su preocupación. Algunos querían estar seguros de que se mantendría su anonimato. El grupo de la Universidad no salía de su asombro. Luego entendieron por qué. Las presiones de los ayuntamientos llegaron hasta la facultad. Quiénes eran para hacer esas pruebas, pusieron en duda los resultados hechos por científicos y con el material y aparatos adecuados para ello, les dijeron que estaban haciendo más mal que bien.

Hoy están decididos a seguir tomando muestras. Porque en el 25% de los 300 pueblos ya analizados, el agua del grifo supera los niveles legales de nitratos. Porque “lamentablemente, tener un informe favorable de potabilidad del agua y tener niveles de nitratos de 150mg/l es posible. Eso está pasando. ¿Por qué pasa? No lo sé. Yo soy científico. Muestreo, mido e informo a la ciudadanía”.

Mandojana (Vitoria-Gasteiz)
Fuente de agua en la Plaza del Ayuntamiento | DATADISTA
Nitrato en cada pozo

Los Barrios de Bureba (Burgos)

  • Más de 20 años con problemas en el agua
  • Contaminación por nitratos
  • Solución: En estudio una canalización de agua superficial

Un ejemplo de una de las zonas que ha terminado por estar más muestreada en esta primera ronda realizada por el Grupo de Polímeros de la Universidad de Burgos, es la comarca de Bureba. En uno de sus municipios, Los Barrios de Bureba, sienten el problema del agua como una prueba más de lo que pasa con los pueblos pequeños. Los servicios van desapareciendo. Nadie atiende sus peticiones. Han perforado en busca de aguas aptas pero ha sido peor: nitratos en todas las aguas, arsénico en algunas. Los habitantes de Los Barrios beben agua embotellada que pagan de su bolsillo porque, en este caso, el Ayuntamiento no dispone de dinero para subvencionarla.

Historia del agua de Los Barrios de Bureba, contada por su alcalde, Daniel Fontes.

Su actual alcalde, Daniel Fontes, está dispuesto a solucionar el problema y está en contacto con la Junta de Castilla y León para estudiar la inversión en una canalización que el municipio, con su pequeño presupuesto, no puede por sí solo afrontar.

MUNICIPIOS QUE NI MIDEN LA CONTAMINACIÓN

Con datos de nitratos reportados en 2022
Sin datos de nitratos reportados en 2022

Junto a los pueblos que ya hoy viven con el temor a usar el agua de sus grifos, conviven los que no saben si es potable. La normativa estatal establece que los municipios en cuyas redes de abastecimiento se distribuya menos de 10m3/día o a menos de 50 habitantes no es obligatorio enviar sus datos al SINAC, aunque sí lo pueden requerir las autoridades sanitarias en función de su situación.

Al menos hay que hacer un análisis completo anual en el cual se miden los nitratos. En 2022, 3.653 municipios no reportaron al SINAC información sobre análisis de nitratos en el agua de consumo realizados en sus redes de abastecimiento. Según Sanidad, este contaminante solo se midió en el 62,9% de las zonas de abastecimiento.

Mandojana (Vitoria-Gasteiz)
Entrada de la casa rural cerrada | DATADISTA
La maldición de ser pequeño: ni te miden, ni te ven… hasta que llega la Vuelta Ciclista

Fresnedo y Barruso (Burgos)

  • 7 años con problemas en el agua
  • Contaminación por selenio, sulfatos, arsénico y fluoruros
  • Solución: Canalización de agua desde la localidad de Torme

Hay una casa rural en el pequeño núcleo poblacional de Fresnedo, perteneciente al municipio de Villarcayo de Merindad de Castilla la Vieja, que es de esas que da gusto hasta mirar. Piedra, madera y teja en la fachada, sillas de mimbre a la puerta rodeadas de vasijas y macetas por todas partes, plantas chorreando desde la terraza del primer piso. En su fachada luce el cartel de Casa Rural al que le han escrito a mano la palabra “Cerrado”. Con el libro de reservas lleno y la inversión hecha, a la casa rural de Fresnedo le llegaron las malas noticias al tiempo que al resto del pueblo: el agua de los grifos no era apta para beber.

Historia de un pueblo al paso de la Vuelta Ciclista, contada por los vecinos de Fresnedo y Barruso.

Probablemente no lo había sido en años pero nadie lo había medido y cuando, el cambio de la normativa, obligó a unas mediciones cuyo coste el núcleo vecinal no podía afrontar, se encargó del servicio de aguas el ayuntamiento de Villarcayo.

En Fresnedo y el barrio vecino de Barruso no tienen un problema de nitratos, son otros los contaminantes de sus aguas subterráneas, pero sí comparten problema con los pueblos pequeños de este país: no les hacen caso. Cuando los vecinos empezaban a desesperarse de las largas que les daban los políticos, se dieron cuenta de que había un momento en el año en que todo el mundo miraba hacia allí: el paso de la Vuelta Ciclista por el Alto de Bocos.

La provincia de Castellón atiende “la práctica totalidad de su demanda" (urbana, industrial y la mayor parte de la agrícola) "con aguas de procedencia subterránea". El agua superficial escasea y, sobre parte de ella, especialmente en el caudal que puede considerarse relevante, existen derechos históricos que limitan fuertemente su uso.

Hay "acuíferos fuertemente sobreexplotados y sometidos a un progresivo deterioro de la calidad de sus aguas, especialmente en las regiones costeras", ", explica el Plan Director de Abastecimiento de Agua Potable de la Provincia de Castellón de 2019, elaborado a instancias de la Diputación de Castellón.

La sobreexplotación, agravada por la sequía, y la contaminación por nitratos, por los fertilizantes utilizados por la agricultura, han tenido en vilo a la provincia en este último periodo seco. Las alertas por contaminación por nitratos en agua del grifo han sido recurrentes a lo largo de los años. Municipios como Burriana tienen desde 2022 instalado un punto de monitorización constante de los niveles de nitratos, pH y turbidez en el agua de consumo humano.

Su alcalde actual, Jorge Monferrer Daudí, que es también presidente del Consorcio de Aguas de La Plana, reconoció en una entrevista con DATADISTA que buscan fuentes complementarias de suministro, como acuíferos no explotados o la posibilidad de utilizar las desaladoras infrautilizadas de la provincia, porque “puede llegar un momento en que la contaminación por nitratos colapse los pozos de los que bebe la provincia”.

TUBERÍA MANCHEGA

Hay una canalización de agua tan larga en España que la idea surgió en 1995, la obra se inició en 2006 y no se inauguró hasta 2023. Ha atravesado varias crisis y gobiernos de distinto signo que la han impulsado o parado y varias sequías de esas que ponen el BOE a publicar a todo trapo. Es tan larga que es una trinchera política entre regiones, gobiernos centrales y municipios. No en vano toma el agua del trasvase más famoso y disputado de España, el del Tajo-Segura.

Recorre 162,5 kilómetros, solo la tubería central y los dos primeros ramales, para llevar agua del Tajo a los pueblos del entorno del nacimiento del trasvase y hasta la Llanura Manchega. Lleva invertidos 370 millones de euros y, cuando se finalicen los dos ramales proyectados aún no ejecutados que faltan, se habrán sumado otros 188 millones de euros. Es agua para beber. No se le puede dar otro fin.

Pero los regantes castellano-manchegos la han pedido y aplaudido porque quita demanda de allí donde ellos cogen el agua: los acuíferos altamente sobreexplotados del Alto Guadiana. Por el mismo motivo, las autonomías valenciana, murciana y madrileña ya han abierto otro frente contra la canalización.

La “tubería manchega” nació con la idea de abastecer a cerca de 70 pueblos de Castilla-La Mancha, históricamente abastecidos con agua de acuífero, con poblaciones que llegaban a sumar 450.000 personas. El problema ya en los noventa se veía que no era coyuntural sino estructural. Se veía en los grifos, en el campo y, ya entonces, en Las Tablas de Daimiel. El daño a las aguas subterráneas a base de perforar el suelo sin descanso para regar parecía de difícil solución salvo que se quitase presión a los acuíferos. Los problemas de calidad en el agua ya eran también evidentes. Eran tiempos tan lejanos que los reales decretos los firmaban un presidente del Gobierno llamado Felipe González y un Rey llamado Juan Carlos.

Por el camino, lejos de quitar presión a los acuíferos, la situación no ha hecho sino empeorar. Tras la sequía de los noventa, se permitió regar el viñedo, hasta entonces prohibido, y el efecto llamada en la cuenca del Guadiana fue enorme. Se permitió y se fomentó. A todo ello se ha sumado el fenómeno de la ganadería intensiva.

Mandojana (Vitoria-Gasteiz)
Castillo de Doña Berenguela en Bolaños | DATADISTA
DEL POZO AL AGUA SUPERFICIAL Y VUELTA A EMPEZAR

Bolaños de Calatrava (Ciudad Real)

  • 4 años con problemas en el agua
  • Contaminación por nitratos
  • Solución: Trasvase de agua superficial por la Tubería Manchega

En marzo de 2020, los 37.000 habitantes de los 12 municipios que se abastecían del embalse de la Vega del Jabalón, vivieron dos situaciones límite: la declaración del confinamiento por la pandemia de la COVID-19 y la declaración de situación de emergencia en el embalse del que se abastecían de agua potable. El Plan Especial de Sequía de la Cuenca del Guadiana les permitía habilitar a corto plazo pozos de emergencia.

Del pozo al agua superficial y vuelta a empezar, la madre de todos los parches por el daño a los acuíferos, contada por concejales del PSOE de Bolaños de Calatrava.

Bolaños de Calatrava, que había bebido históricamente de pozo hasta que se conectó a las aguas del Jabalón, trató de recuperar sus pozos históricos pero pronto se quedaron secos. Abrieron entonces sondeos de emergencia y empezaron a bombear agua hacia sus grifos. Entonces se vio que el agua superaba los niveles máximos admitidos de nitratos. La Junta de Castilla-La Mancha se encargó de afrontar los casi 760.000 euros de inversión en una planta de ósmosis inversa para eliminar los nitratos del agua. La red de agua local de fibrocemento, muy envejecida tras más de 50 años de vida, no pudo soportar el cambio de aguas y de presión y empezó a reventar aquí y allá.

El alcalde, del PP, con quien se ha intentado en repetidas ocasiones hablar para este reportaje sin éxito por el momento, tomó la decisión con el equipo de Gobierno de parar la desnitrificadora a pesar de la inversión acometida por la Junta, de distinto signo político. El coste de mantenimiento y el desperdicio de agua para obtener un litro de agua potable les parece inasumible. Ahora el pueblo espera su turno para que les llegue el agua superficial de la tubería manchega, a la que está previsto que se conecten en algún futuro los 12 municipios de la Vega del Jabalón.

Igual o superior a 30mg/l
Igual o superior 50mg/l
Zonas Vulnerables a Nitratos

Este mapa muestra, por debajo de los municipios con problemas por nitratos en el agua de consumo humano, las zonas vulnerables a la contaminación por nitratos. Son áreas establecidas por las Comunidades Autónomas donde la concentración de nitratos en aguas subterráneas y superficiales supera los límites establecidos. En estas zonas, el uso de fertilizantes está limitado.

Igual o superior a 30mg/l
Igual o superior 50mg/l
Zonas Vulnerables a Nitratos
Macrogranjas de porcino

La ganadería industrial también juega un papel destacado en la contaminación por nitratos. Las macrogranjas de porcino, que han proliferado en los últimos años, generan purines que se utilizan como fertilizantes en los campos. Se concentran principalmente en las comunidades autónomas de Aragón, Cataluña, Castilla y León, Castilla-La Mancha y Murcia.

Directiva de Nitratos

Así falló Europa en la protección de sus aguas

Buen estado
Mal estado
Estado desconocido
Datos aún no reportados y/o divulgados

El empeño en abonar más de lo necesario podría estar mermando los beneficios del sector agrícola entre 13.000 y 65.000 millones de euros al año, calculó Bruselas en un informe publicado en 2021. Las pérdidas anuales por las medidas necesarias para afrontar esa contaminación superan los 70.000 millones de euros.

La Directiva de nitratos obliga a los Estados a identificar las aguas afectadas por contaminación y en riesgo de estarlo y designar Zonas Vulnerables a Nitratos (ZVN) allí donde la agricultura y la ganadería estén contribuyendo de forma significativa a esa contaminación.

Europa permite a los países miembro elegir entre designar ZVN específicas allí donde se detecta contaminación en las aguas, momento en el que pasan a ser obligatorias una serie de medidas para revertir la situación y su refuerzo en caso de que no sean efectivas, o aplicar los programas de acción en todo su territorio.

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Mapa con las masas de agua subterránea con impacto por nitratos declaradas hasta mayo de 2024 por 16 países de la Unión Europea. España, Francia, Italia, Bélgica, Países Bajos y República Checa son los que declaran un mayor porcentaje de sus acuíferos con impactos significativos por nitratos producto de la agricultura y ganadería.

Mapa con las Zonas Vulnerables a Nitratos declaradas en 2021 a la Comisión Europea. Países como Alemania, Bélgica, Dinamarca, Países Bajos o Irlanda han declarado todo su territorio como zona vulnerable a nitratos para asegurar la protección de sus recursos hídricos.

DIRECTIVA MARCO DEL AGUA

Las trampas en las zonas contaminadas de España que demuestran los datos

España optó por designar zonas concretas en un puzle que depende de las CCAA y que ha hecho que pueblos vecinos puedan estar dentro o fuera de la zona que obliga a tomar medidas incluso descansando sobre la misma masa de agua en mal estado. Según Miguel Quemada, catedrático de la Universidad Politécnica de Madrid que lleva más de 30 años estudiando el vínculo entre agua y nitratos y cómo minimizarlo, este país se ha dejado fuera de las ZVN declaradas buena parte del territorio que los datos muestran ya que está contaminado. Para solucionarlo, debería incrementar la extensión de sus ZVN en un 70%, concluye un informe publicado recientemente por Quemada y otro grupo de científicos en el que analizan la situación de los nitratos en los diferentes países de Europa.

Entrevista con Miguel Quemada, catedrático de la Universidad Politécnica de Madrid

Quemada lleva años trabajando sobre el terreno en fórmulas para minimizar la lixiviación de los nitratos, que escapen de las raíces y acaben contaminando las aguas. Propone un listado de soluciones desde las más tecnológicas, que consisten en medir el nivel de nitratos que ya está presente en agua y suelo y solo aplicar la diferencia respecto a la recomendación para cada cultivo o combinar cultivos de raíz corta con otros de raíz más larga que capturen el nitrato que se les escapa a los primeros.

Cree que es posible mantener niveles de producción en la agricultura similares a los actuales si se toman algunas de esas medidas, aunque plantea que a Europa le falta decidir quién tiene que pagar esa enorme transformación. Lo que le parece temerario es que España se haya empeñado en ser líder en producción de carne de porcino y avícola a base de importar piensos que los animales transforman en excrementos y acaban contaminando los acuíferos. Cree que no queda otra que limitar la ganadería intensiva si se quieren preservar las aguas subterráneas.

Quemada no ve posible que se logre ya tener los acuíferos en buen estado en 2027, como exige la Directiva Marco del Agua, porque la inercia del agua subterránea es muy lenta. Lo importante, para él, es que se cambie la tendencia cuanto antes, especialmente allí donde el agua subterránea se destina a consumo humano.

MAPA INTERACTIVO: Conozca el estado de las aguas subterráneas de la Unión Europea
Buen estado
Mal estado
Estado desconocido
Datos aún no reportados y/o divulgados
IMPACTO DESCRIPCIÓN DEL RIESGO
L Disminución del nivel de agua subterránea (profundidad del acuífero, volumen de agua) debido a extracciones.
N Contaminación por nutrientes, principalmente de fertilizantes y residuos animales, por encima del límite legal o cercano al límite con una tendencia ascendente.
C Contaminación química distinta de los nutrientes (principalmente pesticidas, pero también metales, hidrocarburos, etc.) por encima del límite legal o cercana y con una tendencia ascendente.
E Impacto en los ecosistemas terrestres dependientes del agua subterránea.
M Contaminación microbiológica.
IMPACTO DESCRIPCIÓN DEL RIESGO
Q Disminución de la calidad del agua superficial asociada a impacto químico o cuantitativo.
I Alteraciones en la dirección del flujo de agua debido a la intrusión salina.
S Intrusión salina o contaminación.
T Otros tipos de impacto significativo.
N Sin impacto significativo.
A Acidificación de los cuerpos de agua.
U Tipo de impacto desconocido.
H Hábitats alterados debido a cambios hidrológicos.
Y Hábitats alterados debido a cambios morfológicos (incluye conectividad).
O Contaminación orgánica.
Directiva marco del agua

2027, objetivo incumplido

La Directiva Marco del Agua obliga a los países de la Unión Europea a que todas las masas de agua, superficiales y subterráneas, estén en buen estado en el año 2027. Eso implica buen estado tanto cuantitativo, es decir, que la masa de agua no esté sobreexplotada, que no se extraiga más agua de la que es capaz de reponer el ciclo natural; como químico, es decir, que la masa no esté contaminada por encima de los niveles establecidos como aptos para la salud.

Muchos de los países europeos ya saben que no van a cumplir con esa fecha. Europa también lo sabe. El debate a nivel interno y externo ha sido intenso.

También los intentos de mover a los Estados a revertir la situación. La Comisión Europea ha abierto diez procedimientos de infracción entre 2012 y 2021, se ha dialogado con los Estados, se ha acudido en ocasiones como en el caso de España al Tribunal de Justicia de la UE, logrando que este sentencie contra el país, especialmente por no aplicar medidas reforzadas allí donde la contaminación por nitratos ya se había mostrado como un problema grave.

Uno de los principales problemas que se encuentra Bruselas son las deficiencias en la información que facilitan los países. Declarar oficialmente y ante Europa que se tiene una masa de agua en mal estado equivale a poner sus ojos en esa masa para que el país demuestre en 2027 que ha tomado medidas para revertir la situación. Los últimos datos que los países están entregando a Europa se corresponden con los planes de Tercer Ciclo de la Directiva Marco del Agua, que va de 2022 a 2027.

Es una fotografía de mínimos pero es la primera vez que una investigación la muestra recopilando todos los datos entregados hasta la fecha en un mapa interactivo en el que se incluyen los diferentes impactos que han hecho que una masa de agua subterránea se haya declarado en mal estado.

Si tienes problemas de contaminación en el agua de tu pueblo, contáctanos a través de este formulario para contarnos tu historia.

NOTA METODOLÓGICA

El análisis de la situación de las redes de abastecimiento de aguas de consumo proviene de los datos que el Ministerio de Sanidad mantiene en el Sistema de Información Nacional de Aguas de Consumo (SINAC). Estas bases de datos solo incluyen información de los análisis realizados por los operadores y autoridades sanitarias en las redes de abastecimiento.